sábado, 28 de febrero de 2009

Me arriesgaré

A quellas cosas que me haces sentir
C cuando me besas y me abrazas
B astan para saber
D onde quiero estar y qué quiero ser de ti
E n tu alma y ser tu amor
F ácil no será
G arantia no hay de que todo salga bien pero
H ay en mis venas unas ganas
I nfinitas de creer en un futuro
J unto a ti en cada batalla, en
K ada dolor , kda alegría
L a recompensa será el aprendizaje y la experiencia y te aseguro que
M i amor por ti crecerá como la flor que
N i el sol inclemente, ni el invierno más eterno marchitará
O rgulloso de caminar a tu lado por un sendero incierto
P ara llegar al destino, que yo siempre he soñado
R ara vez sucede que yo me deje llevar por la emoción
S abiendo todo lo que he vivido y lo que me ha pasado
T odavia me quedan ganas de soñar, de soñarte de
U nirnos y ser uno
V ivirte
W ayas a donde vayas
X iempre estar contigo
Y si el dolor hace visita y decidiera quedarse
Z olo se que te daré lo que siempre quise darte

viernes, 27 de febrero de 2009

Implante de corazón

Tú querías un esclavo
Que te sacara aquel clavo
Yo el iluso empedernido
Tú no vales ni un centavo

Tú querías un idiota
Pa’ que fuera tu mascota
Yo el perrito faldero
Tú no vales estas notas

Tú querías un pañuelo
Pa’ que fuera tu consuelo
Yo me disfracé de Klee nex
Tú, ave de mal agüero

Tú querías un rehén
Pa’ que fuera tu sostén
Yo por siempre el secuestrado
Tú me dejas con este desdén

Tú querías un abrigo
Pa’ pasar fríos domingos
Yo por ti un cuello de tortuga
Tú eres ese dolor de cabeza que por mi bien mitigo

Tú querías compañía
Pa’ pasar las pesadillas
Yo 24 x 7
Tú no vales la agonía

Tú querías un jarabe
Pa’ quitar a tu quién sabe
Yo por ti clembunal, broxol
Tú pensando en tus pesares

Tú buscabas algo.
Calmar la comezón
Yo una mano, unas uñas
Siempre a disposición

Tú no pudiste conmigo
Ser feliz como yo quise
Claro si fui sólo un extraño
Que pasó tiempo contigo

Hoy por hoy ya ni te acuerdas
De las noches que pasé
Preguntándole a la almohada
Qué hice, en que fallé

Tu querías un implante
Yo tenía el corazón
Pero tú no eres paciente
Yo tampoco doctor.

sábado, 21 de febrero de 2009

No eres bienvenida


Eres la acompañante de los desdichados
No importa si estas acompañado, tu presencia se clava dentro
En los huesos, en la sangre, en el pensamiento.
Vienes para hacernos pensar que somos miserables
Y aunque eres buena de a ratos, muchos te temen

¿Por qué tu presencia es tan imponente?
¿Quién te has creído?
Cuándo te darás cuenta que no eres bien recibida
Como siempre estás sola, buscas compañía
No te vamos a dejar entrar, aunque quieras.

Quédate sola, soledad.
Aquí no eres bienvenida

viernes, 20 de febrero de 2009

Lo que el orgullo no me deja decirte

No me beses después de herirme (bésame, bésame todo lo que puedas, que en mis labios no quede más saliva)

No me mires más (mírame por favor, quiero quedar grabado en esas pupilas tal como lo hice una vez)

No quiero que me busques ni que llames (búscame, búscame aunque no me encuentres, que el mundo se me vino encima y ya no tengo donde vivir, llámame, necesito la melodía de tu voz para comenzar el día y terminarlo)

Ignórame, pretende que nunca existí en tu vida (no te atrevas a ignorarme, prefiero que me odies, porque es un esfuerzo por sacarme de tu cabeza, no me ignores)

Al fin y al cabo no te necesito (te necesito más que nunca, date cuenta, abrázame y finjamos por un día que nada de esto pasó, que no está pasando)

No volverás a saber de mí (quizás no sepas de mí, pero yo sabré de ti cada día hasta que ya no duela)

Quizás algún día podamos ser amigos (nunca seremos amigos, este amor no tiene comparación y no se puede reducir ni adaptarse, es lo que es, irrefutable, intransigente)

Adiós
(hasta mañana…)

miércoles, 18 de febrero de 2009

Sobreviví



Ese día me sentía más confiado que nunca, y estaba 100 por ciento seguro de mis sentimientos pero fui a abrazarte y me choque con esa barrera, con ese muro que ni los rusos hubieran podido tumbar. Fui a besarte y me tope con tu mejilla, pensando que fue ida mía hice el movimiento de nuevo y me tope con la otra. Pensé que no estabas de humor. Al pasar un rato te dije que te amo y no respondiste, no hiciste ni una seña, ni siquiera disimulaste. Ya no lo sentías. Mencionaste esas palabras que nadie olvida y de las que nadie se salva, las que todo el mundo usa. “Tenemos que hablar” pero lo menos que hiciste fue hablarme. Después de decirme todo eso hubieras cambiado la frase a “Debo destruir todos tus sueños conmigo, debo matar toda ilusión que creaste, las metas que te propusiste conmigo”.

Allí con los sentimientos a flor de piel me dejaste en el portal de tu puerta
Mis ojos gritaban pero mis labios no podían mencionar palabras
Las manos como hielo, los pies completamente paralizados
Condenado a mirarte, de algún modo asimilar lo que hacías y tenerlo en mi recuerdo para siempre.

Me diste un abrazo pulverizante, ahí acabo todo.
Sobreviví como todos lo hacen
Siempre las mismas historias con distintos personajes.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Triste princesa


Yo te dije que creyeras, sin embargo, ya yo no creía
En secreto tenia un pañuelo.
Te pedí que no lloraras pero en tu corazón tenías tantas lágrimas contenidas.
Te brindé cada abrazo que pude.
Pero tú no querías salir de ahí donde te pusieron.
Ese rincón donde tu piel de porcelana parecía húmeda y mohosa de tanto llorar
En la penumbra donde tus ojos de miel ya no brillaban
Esperando el día en que tu amo te recogiera y te pusiera cual marioneta.
Ahí estabas tirada todo el día y aunque el sol se asomaba por una ventana y te bañaba con su luz tú querías permanecer sucia, triste, sola.
No fui yo quien rescató a la princesa.
La princesa no quiso ser rescatada
Quería llorar hasta secarse, sufrir hasta morirse.
La princesa siempre está triste
Soy yo quien la hago sufrir.
La princesa y yo sufrimos juntos.

martes, 10 de febrero de 2009

La cena perfecta


Quiero contigo la cena perfecta
De entrada unos besos
De principal uno para el otro
De postre el amor

Pero al final... Todo termina en lo mismo


¡UNA CAGADA!

¿Qué soy?


¿Qué es la lluvia sin tu compañía?
¿Qué es el frío sin tu abrazo?
¿Qué es el sol sin tu sonrisa?
¿Qué son las palabras sin tu voz?
¿Qué son los teléfonos sin tus llamadas?
¿Qué es una puerta sin tu espera?
¿Qué es un te quiero sin tu alma?
¿Qué es una playa sin tu ocaso?
¿Qué son las almohadas sin tu pecho?
¿Qué es un amanecer sin tu cuerpo?
¿Qué es un cuello sin tu beso?
¿Qué es una espalda sin tu mano?
¿Qué es una mano sin tu apoyo?
¿Qué es una lagrima de felicidad?
¿Qué es una canción sin ti?
¿Qué es un beso sin tu boca?
¿Qué es una boca sin tu risa?
¿Qué es un viaje sin destino?
¿Qué son los sueños sin tu recuerdo?
¿Qué es un olvido sin recuerdo?
¿Qué es un miedo sin un triunfo?

¿Qué soy yo?
Dejé ser yo, el día en que dejamos de ser dos

Que vaina..


Entrando un poco en lo banal y superficial.
Todos hemos tenidos esos días malos, duros. Uno amanece con “el feo alborotado”
Y no sólo eso, toda la sociedad confabulará en tu contra para hacerte sentir el mas o la más miserable ese día.

¿Quién no ha tenido una espinilla? ¿Un mal corte de cabello? ¿Una alergia?
Bueno,basta que la tengas cualquiera de esas cosas y otro poco más para que seas el centro del universo.
Empecemos por las espinillas, a todos les salen, nadie puede escapar de ellas. Por lo menos una vez harán territorio en tu rostro.
Bueno resulta que te paras de aquella noche en que no dormiste bien y que te dolía un poco el rostro pero no le prestaste mucha atención. Te lavas la cara y guazzzzzzz ves aquel intruso en tu cara, que te mira como diciéndote- Aquí me voy a quedar- Algunos tratan de hacer hasta lo imposible por quitársela del rostro, hasta llegar al punto donde quedas peor que con la espinilla(yo) y por otro lado algunos dicen “Lo mejor es no tocarse”. Bueno OK es verdad quizás la mejor opción sea no tocarse pero sí por lo menos hacer algo al respecto… Coño.. tampoco quieres que cuando saludas a alguien tu atención sea completamente desviada por su nuevo “amigo” y que de paso tenga un mes ahí. Pero hay que pensar un poquito. No creo que nadie diga “ay que fino mi primera espinilla” entonces piensa antes de decir “TILIN” (simulando un timbre) cuando ves a la persona. En ese momento provoca decirle a la otra persona – Y tú que no te bañas, que hueles mal, que tienes mal aliento- Pero no. Nos controlamos en la mayoría de los casos.

El corte de cabello, conchale porque todo el mundo cree que tiene derecho a opinar sobre tu corte de cabello, si lo tienes pegado a tu cabeza, entonces es sólo de tu incumbencia, además la mayoría de los comentarios son negativos. Uno sale de su casa diciendo “verga, que arrecho me quedó” y llegas a la Universidad y la caraja que nunca te ha dirigido la palabra y que de paso esta buena te dice “Ay pero me gustaba más como te veías antes” ESTUPIDA, ¿por qué no lo dijiste antes? Ahora soy yo el que tiene que mirar esta cara todas las mañanas pensando que estuve a un paso de gustarte.
Pero eso no acaba ahí, ese día en que te quieres poner una gorra y en el caso de las mujeres amarrarse una cola dicen: “Hoy es la foto del carnet, por favor sin gorras y cabello suelto las niñas ;)” ¡No me jodas! ¿No pudo ser ayer?

Las alergias, erupciones y demás.
Coño hasta la gente que no te conoce te pregunta ¿Eso es una alergia? ¿Se pega? Uy no me toques. Y no falta el que te dice, ah sí ah mi mamá le dio eso... ella orinó en un pote y lo dejó secarse al sol. Uy no, de paso que tengo una alergia mi cuarto va a oler a “meaos”.

¡¡Que vaina!!

domingo, 8 de febrero de 2009

No hay corazón


Se me perdieron los latidos, no habrá nada que me mantenga en pie
Ya no bombea, ya no funciona.
No queda aire, no queda sangre.
No hay un corazón que te ame, que te espere, que te añore.

Se detuvieron los latidos en el momento en que hablaron tus acciones por tus palabras
Y cuando el silencio tuvo un puesto fijo en tus expliaciones.
Ya no me engaño, ya no hace daño.
No hay un corazón, que te arrope, que te quiera, que te toque

Calmo mis latidos. En la tormenta de mi soledad cuando tú, pensamiento, vienes a mi cama.
Cuando me pierdo en una isla de almohadas y cobijas. La noche me quema, tu ausencia me quema.
Calmo mis latidos, calmo mis gemidos
No hay un corazón que te reciba, un corazón masoquista.
Pero no es suficiente porque te quise con cada parte de mi cuerpo, no sólo con mi corazón.